Así como la veis, coronada ( y coja), llego Hiru a Navarra, su tierra natal, como las reinas, viajo para ser coronada en su tierra y bautizada por primera vez en tan insigne destino como le marcan sus genes : el pastoreo de ovejas.
Hiru dem
ostró instinto, pero vuestro instinto humano os dirá ( y la vista también) que la que no tenia mucho instinto para mover el rebaño era la pastora. El estilazo de la carletina como pastora se vislumbra ya en la manera de coger el bastón del pastor. Le hará falta más de una práctica.La visita también sirvió para reunir a la família de la Reina de Navarra ( Hiru, of course) aquí vemos a Hiru con su hermana mayor Yeleen, otra pastorcilla en potencia.
Por cierto, este manto que veis en el suelo no es el corcho deshecho que poneis los de allí abajo en el Belen en Navidad, es NIEVE de verdad. Y las zorritas són Hiru i Yeleen, pastoreando entre ellas.Para finalizar este escueto reportaje, porque hay más fotos ( tengo una cámara nueva) también viajaron a Navarra los dos de aquí abajo. Mientras unas pastoreaban, otros estaban haciendo de maniquis para el catálogo del Corte Inglés el próximo invierno.
